En el fondo era graciosamente irónico, se había hecho multimillonario vendiendo al mundo entero la mejor agua mineral del planeta y ahora, su afán por la aventura y una avería en su globo aerostático, lo condenaban a morir de sed en medio de aquella inmensa soledad. Cerró los ojos...
...Abrió los ojos. Una muchacha se acercaba caminando ágilmente, indudablemente era un espejismo, porque la joven caminaba completamente descalza sobre la abrasadora arena del desierto. Cerró los ojos...
...Abrió los ojos. La joven lo miraba desde la altura, tapaba ligeramente la imagen de la luna llena que embellecía con su presencia aquel paisaje, aquella trampa mortal. Se arrodilló a su lado y Stephen, fue perdiendo la conciencia con la sensación casi real, de que la joven le levantaba ligeramente la cabeza. Cerró los ojos...
Título: Stephen \ Género: Ficción \ Autor: El Susurrador \ Imagen: de (aquí)
6 comentarios:
Haber si cierra los ojos una cuarta vez y se despierta pobre pero con la vida por delante!!! jajaja Justo se le ocurre pasear en globo!! ves si hubiera sido mujer y se le aparece el caballero salvador más que abrir los ojos lo hubiera retado por tardar tanto jajaaj
Oye me gustó mucho!!
Saludos
Noe
Los espejismos superan a veces la mejor de las realidades...
La mala pata de los ricachones, es como la de sus congéneres más paupérrimos, y si se cae uno en medio del desierto del Gobi y van las ranas con cantimplora, de nada sirve el haber hecho fortuna con el agua minero-medicinal.
Saludos
R - Noelia
No dudo de tus palabras en cuanto a si esta historia le hubiese ocurrido a una mujer, es más, las suscribo como propias.
Un abrazo.
R- Laquesuscribe (o no)
... Pero hay espejismos que matan.
Encantado de verte por mi casa y poder saludarte.
Un abrazo
R - Food and Drugs
Como decía una telenovela (creo) porque de lo que sólo me acuerdo es del popular nombre:
Los ricos también lloran.
Pero esto le podría haber ocurrido a cualquiera.
Saludos Paisano.
Publicar un comentario